Cuántas noches, mi amor, ¿cuántas noches hubieran sido? ¿Cuántos días camuflados bajo el poder de las sábanas y bajo la influencia de tu cuerpo durmiente?
Hay pensamientos que me provocan un estado de encierro mental, seguido por la desesperación ante la falta de salida. O mejor dicho, ante la imposibilidad de volver a entrar.
Necesito que el agua hidrate ciertas raíces que olvidé. Revivir senderos de vida que juré no volver a transitar. Asumir cuestas que nunca voy a poder emprender, cuestas que sólo se bajan, sin mirar atrás.
Una vida llena de andares y venires. El impedimento de asentarse, el miedo a permanecer, porque es sabido, en algún momento hay que seguir.
Yo te miro todos los días, todos, aunque vos no me veas a mí. Lo sabés.
Y entonces me dedico a consumir mi vida en cigarrillos, humareda que recrea ciertos fantasmas, imagino tu cara del otro lado, aspirando el humo. Pero acá sólo hay un cenicero que rebalsa errores y frustraciones y vos no vas a llegar.
Se acabó el pucho. Fue un gusto, corazón.
2 comentarios:
mariannn
dos cosas:
-ya te lo dije, pero repito.. tan re buenas las cosas q escribis! te felicitoo
-y2, el reloj sigue marcando la hora vieja :P jaja
buen, te mando un besoo
nos vemos el dia q me recuperee (no aguanto masss)
suerte el sabado! ubaD al podioo
che qunda que onda señor busshhh
el reloj es verdad marca cukiera
y por diooo me ree gusto el postio
yo mepauqe voy a postia pero cuando tenga algo de tiempo
mientras escucho a ivan noble que me viene siguiendo desde hace un rato ¬¬
he dicho
beso bloggeraaa
kiero visitar tu libreriaaaa
vos visita mi video clubbb (?)
igual el video club existe en casa ç... pero deberia poner un local antes de uqe mama me tire todos los poster vhs y dvds
como termine hablando de cine
no lo se
en feenn
besoooooo
y si miras peli mirate los 400 golpes o 8 1/2 si ya las viste sos grosa
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